1 día en la paradisíaca Isla Jeju

Día 1 en las Isla Jeju

Esta fue una de las paradas de nuestra luna de miel, el crucero Celebrity paraba en China, Corea del Sur, Taiwan, Japón y Hong Kong y una de esas paradas en Corea del Sur, fue la de la maravillosa Isla de Jeju (Jeju Island) conocida por ser, el Hawai asiático.

Solo disponíamos de unas pocas horas en esta isla, así que elegimos una excursión que nos permitía conocer algunos de sus lugares más emblemáticos, aunque por supuesto, no pudimos visitar todo lo que nos hubiera gustado, entre otros, el volcán y sus túneles naturales de lava que, dejamos para nuestra próxima visita.

Desembarcamos en una isla que nos encantó desde el primer momento y en la que inmediatamente supimos que, era el lugar en el que nos gustaría perdernos y si alguna vez lo hacemos, puedes empezar a buscarnos por allí.

Kensington Resort

Comenzamos el recorrido comiendo en Kensington Resort, donde nos prepararon a todos una comida increíble y todavía recordamos la opción vegetariana que fue entre otras cosas, una riquísima ensalada de flores que era tan bonita que daba hasta pena comer.

Justo en la entrada del hotel puedes encontrar una estatua hecha de piedra volcánica, muy similar a los moais en la Isla de Pascua. Estos se llamaban “abuelos de piedra” y los puedes encontrar en varios puntos alrededor de la isla.

Templo Yakchunsa

El autobús nos llevó al Templo de Yakchunsa, para nosotros, uno de los templos más bonitos que visitamos en nuestro viaje a Asia y probablemente en nuestro Top 5 del mundo.

El templo era muy tranquilo y sin apenas gente, aparte de nosotros.
Llegamos cuando los monjes lo estaban decorando con globos y farolillos, posiblemente para una celebración próxima que hacía de este templo, un lugar todavía más colorido.

El templo no era muy grande, pero cada uno de sus espacios eran mágicos, uno de ellos tenía un gran dragón, el otro un techo con miles de pequeños farolillos colgando que, se mecían suavemente por el aire que entraba por las ventanas y otro espacio, repleto de pequeños budas dorados.

El templo se encontraba en una especie de plaza y en ese misma plaza, también había dos torres más pequeñas, una de ellas tenía un enorme tambor y la otra, una gran campana.

Acantilados de Jusangjeolli

La siguiente parada fue la increíble formación rocosa Jusangjeolli, un acantilado de basalto que forma pilares que parecen construidos por el ser humano.
Sus formas tan perfectas, hacían pensar que no eran creadas aleatoriamente por la naturaleza.

El autobús nos paró justo en la entrada y nosotros solo tuvimos que seguir un pequeño sendero que nos llevó a un paseo-mirador desde donde pudimos sacar algunas fotos de esta maravilla natural.

Al salir del sendero, vimos a una “womandiver”, una mujer buceadora, una profesión tradicional y típica de la isla Jeju y llevada a cabo por mujeres.
Ellas son las que se dedican a pescar el marisco a mano y tal y como marca la tradición.
Estas, tienen un conocimiento del mar y sus mareas muy extenso y además, son capaces de contener la respiración durante largos períodos de tiempo mientras pescan.

Esta womandiver vendía pepinos de mar, pulpos y caracolas que ella misma acababa de pescar.

Jardín Botánico de Yeomiji

Nuestra siguiente parada fue el Jardín Botánico de Yeomiji, donde pudimos ver muchas plantas y variedad de flores.
Si eres un apasionado de las plantas, esta es una parada necesaria para ti.

Las Cascadas de Cheonjiyeon

Cerca del Jardín Botánico, puedes visitar las cascadas de Cheonjiyeon, en este espacio natural puedes ver 3 cascadas relativamente cercanas entre sí y de acceso bastante sencillo.
Puedes llegar a dos de ellas en unos pocos minutos andando desde el parking y para llegar a verlas bien, deberás bajar varias escaleras que te llevarán al lado del rio y te ofrecerán unas vistas magníficas.

En este recorrido tuvimos tiempo de visitar solo 2 de ellas porque la otra estaba un poco más desplazada y el guía no quería arriesgarse a llegar tarde al crucero, lo que, era bastante probable visto que el promedio de edad del tour era de unos 75 años, baja porque nosotros dos teníamos veintitantos.

Puente Seonimgyo o el Puente de los Siete Ángeles

Después de un poco de naturaleza y tiempo para disfrutar de las cascadas, caminamos hasta el Puente de los Siete Ángeles, un puente muy largo que al cruzarlo, podías visitar una parque, una fuente y un edificio que nunca supimos realmente qué era.

Misterious Road

El bus nos llevó a la última parada del tour que fue para nuestra sorpresa, tan extraña como sonaba.

Fuimos a visitar la Misterious Road (la carretera misteriosa), donde los coches, estando en punto muerto, rodaban cuesta arriba.

Creo que este era uno de los lugares con más aglomeración que visitamos de toda la isla, fue realmente divertido ver a todos los conductores de coches, taxis y autobuses conduciendo cuesta arriba con las manos y las piernas en el aire sin tocar los pedales del vehículo.

Algunos guías turísticos incluso llevaban consigo herramientas como un nivel para demostrar a sus pasajeros la pendiente de esta carretera que estaba llena de turistas tomando fotos como si Lady Gaga se hubiera perdido por esa carretera remota.

Después de un día increíble visitando templos y maravillas de la naturaleza, volvimos al puerto, abordamos el Celebrity Millenium y nos dirigimos a nuestro próximo destino.

Información Útil

Consejos

• Al igual que en Corea del Sur, todo el mundo estaba muy predispuesto a ayudar, aunque la barrera lingüística seguía siendo un problema para comunicarte con ellos.
• Era una isla muy tranquila, sin atascos ni grandes aglomeraciones.
• En el Jardín Botánico podías comprar churros, nos pareció curioso encontrar en un lugar así, una comida tan típica que para entonces, ya echábamos mucho de menos.
• Si tienes más tiempo que nosotros, te recomendamos visitar el volcán y sus túneles de lava. Nosotros no nos atrevimos a ir por nuestra cuenta porque el barco solo estaría atracado por unas pocas horas.